¿Cómo vas a gastar tu dinero a partir de ahora?Publicado el Lunes 19-09-2022 - (5 comentarios)
Lo sabes porque no hacen más que repetírtelo en las noticias.
De hecho, es seguro que va a existir esta crisis. No porque los expertos sean adivinos, sino porque va a ser provocada. Lo han dicho sin tapujos. Va a haber una recesión económica porque van a subir los tipos de interés exageradamente. Dicen que lo van a hacer porque es mejor una recesión que una inflación desbocada.
Y bueno, como ellos son los expertos, pues les tenemos que dejar hacer, nosotros ya si acaso acatamos.
Como cuando la pandemia, que decían que nos teníamos que encerrar y lo hicimos porque ellos sabían y nosotros no. O como con la guerra, que nos dicen que los ucranianos son super buenos y los rusos super malos. Porque los rusos, los cubanos y los venezolanos son siempre malos. EEUU y Europa son guays.
El caso es que calentar las casas este invierno va a ser un drama. Pero como han decidido que los rusos son super malos, pues vamos a tener que pagar todo mucho más caro porque sus estrategias políticas así lo han decidido sin ni siquiera preguntarnos si en esta guerra estamos a favor de los rusos, de los ucranianos o simplemente no estamos a favor de nadie porque ambos han cometido genocidios los últimos años.
Aun no nos hemos recuperado del Covid, todavía ni siquiera hemos sufrido un invierno con el gas por las nubes y ya nos avisan que nos vayamos preparando para una crisis económica, que ellos van a provocar subiendo los tipos de interés para librarnos de la inflación. Es importante constatar que siempre las decisiones las toman pensando en nuestro bienestar.
Por mi parte, yo, que tengo una agencia de viajes, con la pandemia me arruiné y me he quedado con una deuda que en principio lastrará mi economía como mínimo 5 años. Las decisiones tomadas por la guerra de Ucrania van a hacer que me cueste lo indecible calentar la casa en la que vivo con mis hijos. Y la próxima crisis económica que van a crear para salvarme de la inflación que ellos mismos han provocado, va a situar de nuevo a mi agencia al borde del precipicio.
Lo que me preocupa no es exactamente lo que pasará en los próximos meses. Lo que me preocupa es que todas estas decisiones de los últimos años las están tomando pensando en mi bien, así que no quiero ni imaginarme lo que puede llegar a suceder cuando se propongan joderme en serio.
Pero no desespero, porque el poder siempre decide, pero todos tenemos rendijas de libertad por las cuales colarnos.
En mi caso, me jacto de que en pleno confinamiento no pasé ni un día sin salir de casa. Sufrí ese encarcelamiento en Malasia, así que ya te puedes imaginar que si el confinamiento en España fue estricto, en un país muy influido por China fue desesperante. Pero me propuse que a mis hijos, que en aquel entonces tenían 1 y 6 años, cada día les tenía que tocar el sol como mínimo 15 minutos. Y lo conseguí. Recuerdo con cariño aquellas mañanas con mis hijos cogidos de la mano, corriendo y escondiéndonos de los guardias de seguridad del rascacielos de Kuala Lumpur en el que vivíamos. Conseguí que a mis hijos les diera el sol y respiraran al aire libre como mínimo un cuarto de hora cada jornada.
Pero realmente conseguí algo más importante: enseñarles, a tan temprana edad, una de las lecciones más importantes que un padre puede enseñar a un hijo, dictada por Ghandi: es legítimo desobedecer leyes injustas.
También somos libres de buscar información y no dejarnos influenciar por las noticias tendenciosas que proponen una dicotomía Ucraina buena-Rusia mala. Por mi parte me he informado lo suficiente como para tener una opinión que a día de hoy creo que ya es inamovible: esta guerra, no quiero que la gane nadie y quiero que la pierdan todos.
Y pueden provocar crisis, pueden hacer que nuestro dinero valga menos, que nuestro dinero se devalúe… pero no pueden evitar que nosotros tomemos consciencia sobre cómo nos lo gastamos.
Y de eso es lo que hoy quiero hablarte.
Ya te lo he dicho al principio, viene una crisis.
Obviamente, nunca van a decir en voz alta que parte de la culpa de esta crisis es por la decisión de haber parado la economía durante más de un año por el tema del Covid. ¿Por qué iban a hacerlo, si es mucho más fácil decir que toda la culpa es de Putin?
No perdamos el tiempo elucubrando sobre si la crisis va a suceder o no. No estamos en esta fase, en la de la negación, estamos en la fase de aceptación.
Y tenemos que aceptar una cosa, irrefutable, innegable e incuestionable: a partir de ahora, nuestro dinero valdrá menos.
Y por eso es muy importante decidir cómo lo vamos a gastar.
Yo me voy a atrever a darte mi opinión, sin que tú me la hayas solicitado, y te voy a decir lo que yo voy a hacer a partir de ahora.
Mi consejo es que desde ya, inviertas en cosas que no te puedan quitar.
Ya te han quitado demasiado, así que no les des más oportunidades.
Olvídate de comprar cosas materiales. Son volátiles, tienen un precio marcado y, en el fondo, nunca son tuyas y en cualquier momento las puedes perder.
Invierte en dos cosas que nadie te va a poder quitar.
Dos cosas que el poder no va a conseguir robarte.
Dos cosas que, pase lo que pase, siempre serán tuyas:
Formación y experiencias.
Aquí es donde tienes que invertir tu dinero.
Ni se te ocurra ahorrar. En España no estamos acostumbrados a la hiperinflación, pero seguro que tienes algún amigo sudamericano que te puede explicar en qué consiste. No cometas la imprudencia de ahorrar un dinero que cada día que pase va a valer menos.
Gástatelo.
Disfrútalo.
Inviértelo.
Pero no te lo gastes en cosas físicas. De hecho, la ciencia ya ha demostrado que comprar cosas materiales aporta una felicidad transitoria, temporal y superflua. En cambio, las experiencias vividas, como por ejemplo un viaje, perduran en el tiempo, procuran una felicidad a largo plazo y te brindan momentos que recuerdas el resto de tu vida.
Viaja.
Vive experiencias inolvidables.
Fórmate.
Aprende.
Nadie va a poder quitarte eso.
Estudia economía, entenderás por qué ahora los bancos no te dan crédito, pero sí que lo harán cuando los tipos de interés estén altos. Y verás hasta qué punto estamos en sus manos, y como va a ser muy difícil desprendernos de estas alimañas.
Lee, estudia, revisa información, aprovecha para formarte más, para convertirte en alguien más preparado. Eso será siempre tuyo.
Vive momentos inolvidables. Te sorprenderás al ver que, en muchos casos, no necesitas una inversión económica importante.
Yo ya estoy preparado para este momento.
Mi Volkswagen Polo tiene ya 17 años, pero no lo voy a cambiar este año, quiero que se haga mayor de edad a mi lado.
No he engordado, ni adelgazado, no he crecido ni he menguado, así que no me compraré nada de ropa.
La ginebra más barata del súper me sigue pareciendo aceptable si la mezclo con una tónica regular y le añado medio limón exprimido.
Ahorraré en cosas superfluas, e invertiré en aspectos que me hagan realmente feliz. Soy mayor, de aquí no mucho cumpliré cincuenta años. Ya no puedo permitirme el lujo de perder más tiempo en cosas insustanciales, en temas superficiales, en aspectos que no son esenciales y me procuran solo una felicidad parcial.
Quiero seguir viviendo como hasta ahora.
Quiero seguir viajando.
Escribo estas líneas al cabo de pocos días de regresar de mi viaje a Gambia.
Y no hay momento más lúcido que ahora, no hay instante en que vea las cosas tan claras como las veo hoy.
Pueden subir los tipos de interés, el precio del gas, de la luz, de la gasolina. Pueden intentar manipular, crear tendencias, confundir. Crear crisis, guerras, confinamientos, conflictos.
Pero no pueden quitarme el recuerdo de una tarde corriendo en una playa gambiana bajo la tormenta. No pueden quitarme la sensación de plenitud cuando recorro en transporte público países que la mayoría de gente no sabría situar en el mapa.
No pueden.
Por mucho que lo intenten.
Nunca podrán borrar de mi memoria instantes inolvidables: mis pies bañados por el océano, el viento golpeando en mi cara, los gritos de los niños africanos pronunciando mi nombre, la sensación de estar en lugares donde no mucha gente llega, el sosiego de sostener una taza de café viendo un atardecer en el río. Nada puede eliminar el recuerdo de un paseo en bici bajo una lluvia torrencial, de bailar con tribus exóticas, de dormir en una cabaña en medio del bosque, de vivir aventuras.
Sí. Tu dinero valdrá menos a partir de ahora.
Así lo han decidido.
Y no podrás hacer nada por evitarlo.
Pero si que puedes decidir cómo vas a gastarlo.
Y eso, es mucho más poderoso de lo que crees.
Fórmate.
Viaja.
Y, sobre todo, recuerda una cosa.
Pueden hacer contigo lo que quieran, pueden tomar la decisiones que deseen, sin ni si quiera consultarte. Pueden cambiar tu vida, devaluar tu dinero, meterte en una guerra, pueden decidir que a partir de ahora vivirás en peores condiciones. Pueden hacer todo esto y mucho más.
Pero nunca, por más que se empeñen, por mucho que se lo propongan, por mucho que lo intenten, podrán robarte el recuerdo de una puesta de sol.
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5 Comentarios
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27/09/2022 - Laura
Qué suerte compartir momentos, recuerdos, sensaciones, silencios, vivencias :-)
19/12/2022 - Ruben
Es sin duda alguna el mejor texto que has escrito y te he leído en mucho tiempo. Cargado de opinión, de verdad, de análisis, incisivo pero comedido (porque entiendo que se podrían decir barbaridades y señalar muy abiertamente a varias personas causantes de estas situaciones, pero es más prudente reservarse la opinión y dejar que quien quiera entender entienda), también tiene toques emocionales que me llegaron, ese tema de los 15 minutos de sol para tus hijos es algo que desconocía y que te ensalza como padre, ejemplo a seguir y ser humano.
19/12/2022 - Rocío
Gracias por compartir tus reflexiones y opiniones
Gracias por ayudarnos ( o al menos a mí) a salir de la espiral en la que nos metemos sin pensarlo si quiera.
Yo siempre he viajado y he pensado que eso es lo más importante para mí, las experiencias, pero también es verdad que soy fácil de asustar, y me tienen metida en casa con miedo a todo.
Pero como la vida tiene sus propios giros de guión, me está dando un toque de atención en los últimos meses y me recuerda todo esto que tú también has venido hoy a recordarme.
Tengo un trabajo inestable desde la crisis de 2008, así que ya he aprendido a vivir sin excesos, no tengo grandes ahorros, pero desde luego no quiero seguir pensando en “para un futuro “ cuando no sé cómo de lejos puede estar.
19/12/2022 - María
Una preciosa reflexión Xavi , estoy de acuerdo con todo
19/12/2022 - Cristina
Precioso Xavi. Como siempre directo al corazón. Un abrazo
